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Hotel del Coronado

El Hotel del Coronado fue construido en la Isla Coronado, California, en 1888. Durante este período, todo tenía que ser importado o fabricado en el lugar. De hecho, contaban con un aserradero, una fundición y una planta de energía eléctrica en la propiedad del hotel. A pesar de los desafíos logísticos, el hotel abrió sus puertas después de 11 meses de construcción. En ese momento, la mayoría de los huéspedes viajaban a The Del en tren, y un viaje desde el este tomaba siete días. Los viajeros adinerados hacían el recorrido con relativa comodidad, y los más ricos contaban con sus propios vagones privados que se acoplaban a trenes en el este y se desacoplaban al llegar al resort; para acomodar estos vagones privados, el hotel tenía una vía de acceso en la propiedad.

El Hotel del Coronado epitomizaba el estilo de vida lujoso de las familias más ricas de América. En su momento, The Del era uno de los muchos famosos resorts estadounidenses del siglo XIX; hoy en día, es uno de los pocos destinos históricos que no solo ha sobrevivido, sino que todavía florece como un hotel de clase mundial.

Inicialmente concebido como un resort de pesca y caza, los océanos y bahías de Coronado estaban llenos de vida marina, y los matorrales cercanos estaban poblados de codornices, conejos y otra caza menor (el chef del hotel cocinaba la captura de un huésped). Además de estas actividades, The Del ofrecía una variedad de opciones, incluyendo billar (con instalaciones separadas para hombres y mujeres), boliche, croquet, natación, navegación, ciclismo, tiro con arco, golf y alta cocina. También había habitaciones especiales reservadas para indulgencias más pasivas, como leer, escribir, jugar a las cartas, ajedrez, música e incluso fumar. El hotel ha evolucionado, pero se puede ver gran parte de la historia original a lo largo de sus instalaciones.

Las torres originales se habían deteriorado rápidamente debido al ambiente de aire salino rodeado por aguas oceánicas. Optar por una construcción completamente de fibra de vidrio era imprescindible para esta propiedad, sabiendo que tendrían una torre que les duraría más de 30 años.

Agradecimientos especiales a Michael Denison del Hotel Del Coronado por permitirnos ser parte de este proyecto de renovación. También queremos felicitar a todos los involucrados en Swinerton, que fue el contratista general de este proyecto.